Colombia debe priorizar la preservación de los recursos naturales por sobre el desarrollo de actividades extractivas y establecer políticas claras y efectivas al respecto.

No podemos seguir tapándonos los ojos ante la  realidad, la tierra grita y las cifras en cuanto a deforestación, pérdida de biodiversidad, humedades, deshielo de nevados, cambio climático ratifican un fenómeno que puede desencadenar una crisis mundial  y que para enfrentarlo se requiere acciones urgentes y  voluntad de todos. Este año es clave para el Planeta y por eso Ambiente y Sociedad como organización de la sociedad civil trabaja para que los líderes mundiales y los  grandes poderes económicos asuman mayor compromiso ante los desafíos ambientales que se refleje en un cambio para la conservación de nuestro Medio Ambiente y la protección de los derechos humanos.

No más promesas necesitamos acciones concretas.

No más intentos fallidos como el del cambio climático que llevamos  20 años planeando alcanzar un tratado internacional para la reducción de los efectos del cambio climático. En 1997 se alcanzó el primer acuerdo internacional sobre esta cuestión, el Protocolo de Kyoto. Estados Unidos, uno de los países que más contamina, no lo ratificó. Desde entonces, se han celebrado varias cumbres internacionales y se han hecho muchos esfuerzos por alcanzar un consenso y ninguno ha tenido éxito.

Este año, tal como lo ha manifestado la campaña global de action2015, de la cual hacemos parte, es la oportunidad perfecta para cambiar el curso de la historia gracias a las dos cumbres internacionales de las Naciones Unidas. Una, en septiembre, durante la cual se acordarán nuevos objetivos (un nuevo marco para la humanidad) para combatir la pobreza, la desigualdad y el deterioro medioambiental. La otra, en diciembre, para establecer las metas de acción sobre el clima, un paso crucial hacia un planeta más seguro.

Como parte de este proceso, hace poco hicimos un llamado junto con otras organizaciones a los Ministros de América Latina para lograr que los flujos financieros ayuden a promover una verdadera transición hacia un desarrollo bajo en carbono, resiliente al clima y en pleno respeto del desarrollo sustentable y los derechos humanos. 

Consideramos fundamental que los mecanismos actuales y futuros sobre financiamiento incluyan criterios de cambio climático y sean compatibles con el desarrollo sustentable.

Atacar las causas e impactos del problema es un pre requisito para terminar con la pobreza y promover el desarrollo sustentable. Por lo tanto, es esencial que los procesos hoy en discusión, tanto dentro del proceso Post 2015 y la reunión de Adís Abeba, como el proceso de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático se encuentren completamente alineados, sean coherentes entre sí y que la visión que promuevan sean la de desarrollo sustentable. De esta manera, el resultado de la reunión de Adís Abeba será clave para el éxito de la COP21.

Por ello, es necesario que el financiamiento para el desarrollo logre impactos positivos en materia de mitigación y adaptación al cambio climático, contribuyendo a lograr economías descarbonizadas y mejorar la resiliencia de comunidades y sectores al cambio climático. Por ejemplo, invirtiendo en eficiencia energética y energías renovables y alejándonos de la dependencia del carbón, gas y petróleo, cuya quema es la principal causa de las emisiones de gases de efecto invernadero causantes del cambio climático.

Sé el cambio que quieres ver en el mundo: Mahatma Gandhi

Finalmente, recordemos en esta fecha que el aporte es de todos,   los seres humanos debemos ser conscientes sobre nuestra relación con la naturaleza, debemos entender que somos sòlo una parte de esta, y es gracias a ella que la vida se hace posible. Cada especie que desaparece y cada ecosistema que se destruye a causa de la actividad humana nos acercan a nuestra propia destrucción, debemos entender que la protección del ambiente es nuestra protección.

Comunicado relacionado: El cambio climático es un fenómeno global con consecuencias locales: Ambiente y Sociedad