La voluntad y preocupación de niñas, niños y adolescentes por la conservación del medio ambiente, plasmada en la carta: “por la vida, por el agua, por la tierra”, clausuró el “Primer Encuentro de Infancia y Adolescencia Frente al Cambio Climático”.
Más de 15 experiencias destacadas a nivel nacional y 4 internacionales, participaron en el encuentro que duró tres días y se realizó en Bogotá.
Niños y niñas de Santander, Antioquia, Caldas, Tolima, Huila, Cundinamarca y Putumayo intercambiaron experiencias con delegaciones de Perú, Ecuador, Argentina y México.
El tema central del encuentro fue: la promoción y el cuidado de la vida, el agua y la tierra. Las iniciativas desarrolladas por las niñas, niños y adolescentes participantes se abordaron desde la cultura del reciclaje, la agricultura, la explotación minera y el cuidado del agua.
El cierre del encuentro contó con la presencia de las delegaciones de las niñas y niños participantes; Andrés Peñafiel, Secretario de Desarrollo Social de Cuenca, Ecuador; el Mamo Francisco Zalabata, Autoridad de la comunidad habitante en la Sierra Nevada, de Bogotá; Astrid Cáceres, Sub Directora para la Infancia; Jorge Rojas, Secretario Distrital de Integración Social y Gustavo Petro Urrego, Alcalde Mayor.
Las conclusiones del encuentro las podrá encontrar aquí en la carta entregada por las niñas, niños y adolescentes al Alcalde Mayor de Bogotá titulada “Por la Vida, por el agua, por la tierra” y en la relatoría grafica que podrá encontrar en la galería de imágenes.
CARTA DE NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES POR LA VIDA, POR EL AGUA, POR LA TIERRA
Bogotá, 23 de septiembre del 2015, Jardín Botánico
Amigo Alcalde Petro
Somos niñas, niños y jóvenes de Perú, Ecuador, Argentina, México y Colombia; que por primera vez nos reunimos para atender con nuestra “oreja verde” a los llamados de la madre tierra… todos y todas venimos de diversos procesos ambientales, nacidos desde nuestras propias ganas y nuestro corazón.
Esta aventura comenzó el 14 de abril con la declaración hecha desde los consejos de niñas, niños y adolescentes de Bogotá, con la intención de reclamar nuestro derecho a la participación, reconociendo que nuestra voz también es importante y tiene voto.
Continuo con el pacto mundial de jóvenes por el clima en Toulouse Francia, “esta experiencia en un país que no era el nuestro pero que nos acogió con gran fraternidad, nos reunimos con pueblos de todos los rincones del mundo, con, distinta etnia, cultura e idioma, donde lo único que importo fue el rescatar el verde del ambiente y compartir ideas de cambio para firmar el pacto.
Después se realizó en Bogotá el 22 de julio de este año, la pre cumbre de niños, niñas y jóvenes por el cambio climático, en la que nos reunimos 400 corazones latiendo por una misma causa. En este encuentro nos comprometimos a: tener conciencia en el consumo del agua y los productos orgánicos, además de lo que compramos, teniendo en cuenta de donde provienen, que contienen y su durabilidad. Cuidar y conservar el buen estado del ambiente de las abejas, en gratitud a su labor y a los frutos que nos dan. Menos uso del transporte convencional y más uso de la bicicleta.
Nos comprometemos a crear una cultura y conciencia del cuidado de la tierra en los comportamientos del día a día. Nos comprometemos a insistir a ser escuchados y estar informados de la situación del medio ambiente. A ser gestores de cambio, cuidando y reutilizando el agua, reciclando y haciendo ecotechos. Reconocer, aceptar y cuidar mi cuerpo como primer territorio de agua. Nos comprometemos a cambiar de pensamiento, ser palabra y acción. Compartir, comunicar el conocimiento, involucrándonos en política, sembrando amor y generando sentimientos de unidad. A cuidar los árboles.
Y ustedes los adultos, Estado, personas tomadoras de decisiones nos responden por: el control urbanístico y la conservación de zonas ambientales. Por, darle una vida digna y justa al campesino, garantizándole productos amigables con el ambiente. Ofrecer una buena y real educación ambiental. Cuidar los ríos a través de la concienciación y evitando que lleguen y se boten desperdicios. Por la protección del agua de los manantiales, paramos y ríos. No deteriorarlos por la extracción de petróleo, además de un gobierno ético, moral y sincero que se preocupe más por la naturaleza que por la economía, que no venda los recursos naturales y destine recursos suficientes al cuidado del ambiente. Descontaminar los ríos, limitar la construcción de fábricas y crear nuevas energías alternativas. Inversión en páramos y humedales para la protección del agua. No a la minería.
A continuación compartiremos las ideas, reflexiones, quereres, pensamientos y sentires, vividos durante estos tres días en el Encuentro de Infancia y Adolescencia de Las Américas frente al Cambio Climático, en la cual 500 niños, niñas y jóvenes de Bogotá, 10 de Latinoamérica, 40 niños de 12 municipios de Colombia, 34 niños de los páramos y 17 niños, niñas y jóvenes relatores que nos hemos encargado de consolidar la propuesta y de sistematizar nuestra propia experiencia, convirtiéndonos en guardianes de la palabra y la vida que hay detrás de ellas.
Agua, tierra, fuego y aire, componen el planeta que habitamos y también nos componen interiormente. La tierra es un ser vivo y al igual que en ella fluyen ríos en nuestro cuerpo también, todo lo que hay a nuestro alrededor es agua, debemos realizar un cuidado de la tierra desde lo espiritual. Entonces nos preguntamos:
¿Explotar por dinero? O ¿conservar la vida? ¿Sientes dolor cuando te quitan un pie? Nuestro planeta no puede contener el llanto por lo que la causa la tala de árboles. Estamos pajareando la vida, aprendiendo y replicando nuestra experiencia a favor del bienestar de la tierra. Hay que cuidar la tierra, hay que cuidar la vida para la esperanza de un nuevo día.
Es triste ver que nuestros padres digan que quieren lo mejor para nosotros y sin embargo dañan el ambiente (maestro Fabián, 11 años, Consejo de Ciudad Bolívar) Estas son nuestros compromisos, nuestras exigencias, nuestros quereres… ¿cuáles son los suyos?.
Bogotá 23 de septiembre, Jardín Botánico, el agua, la tierra, la vida, el mundo….”
Firmantes,
Relatores representantes de niñas, niños y adolescentes de Colombia.