Escrito por : CLARA
El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterrez abre la semana de Asamblea General en Nueva York con una “Cumbre de Acción Climática”. Este evento de un día intenta estimular nuevos compromisos por parte de los países y mayor ambición general en alcanzar vías que nos permitan estar bajo los dos grados centígrados de calentamiento. La red internacional CLARA – Alianza por el Clima, Tierras, Ambición y Derechos – celebra el foco en la ambición por parte del Secretario General Guterrez, y nuestros miembros esperan con interés el participas de la Cumbre.
La última “Cumbre de Acción Climática” citada por un Secretario General de las Naciones Unidas, ocurrió hace cinco años, previa a la conferencia climática en Paris, que llevo a nuevos compromisos nacionales y una nueva meta global de ambición (limitar el calentamiento a 1.50C).
¿Qué podemos esperar de la programación oficial de la Cumbre de la próxima semana?
Un acontecimiento muy positivo en la agenda de esta Cumbre es la mayor atención que se le da a las oportunidades de mitigación provenientes del sector de la tierra, conocidas como “Soluciones Basadas en la Naturaleza” (SBN). SBN es una de las nueve líneas de trabajo de la Cumbre, y sorpresivamente, una de las mas prominentes. (Las otras líneas incluyen: estrategias de mitigación, motores sociales y políticos, juventudes y movilización, transición energética, resiliencia y adaptación, infraestructura, ciudades y gobiernos locales, financiamiento climático y precio del carbono y la industria). Personal de las Naciones Unidas – y los países que copresiden la línea de trabajo de SBN, China y Nueva Zelanda, solicitaron a países y ONGs, ejemplos de “acciones climáticas” para presentar en la Cumbre. Miembros de CLARA presentaron más de una docena de ideas a la línea de trabajo de SBN con acciones sobre derechos de la tierra, restauración y agroecología cubriendo cuatro continentes. CLARA seguirá los nuevos compromisos pactados por los países y brindará actualizaciones a medida que se presenten.
Un Manifiesto sobre “Soluciones Basadas en la Naturaleza por el clima” fue hecho público por estos líderes el mes pasado, lo cual genera un rumbo importante para esta línea. Entre los puntos clave:
- El clima y la biodiversidad están interconectados. Los ecologistas han reconocido desde hace mucho tiempo que la crisis climática no puede ser abordada separadamente de la preocupación por la biodiversidad, pero estas conexiones han emergido muy lentamente en los principales órganos creados para enfrentar estas crisis.
- Se necesitan soluciones a largo plazo. ¿Por qué el largo plazo es importante? Las emisiones acumuladas en el tiempo de Gases de Efecto Invernadero aumentan la “fuerza de radiación” responsable por el inexorable aumento de temperatura. La restauración de ecosistemas no es una solución instantánea; los valores máximos de secuestro de carbono en bosques con restauración activa toman al menos una década, y algunas veces mucho más. Por tanto, para obtener soluciones a largo plazo debemos empezar inmediatamente.
- ¡Paren de destruir la naturaleza! utilizando el lenguaje políticamente correcto de la diplomacia internacional, el Manifesto hace un llamado a tener “procesos de gobernanza que estén diseñados a parar la destrucción de la naturaleza”. Nadie puede no estar de acuerdo con esto – pero, aun así, es importante hacer el llamado a acabar con la destrucción. Como la que está ocurriendo en Brasil con los fuegos en la Amazonía. Como la que está ocurriendo con la negación climática en Estados Unidos y el arrendamiento generalizado de tierras públicas para la exploración de combustibles fósiles. Tanto la Unión Europea como China están haciendo un mejor trabajo interno al implementar “procesos de gobernanza” amigables con la naturaleza, pero la demanda de consumo en estos lugares, particularmente por productos ganaderos (carne y lácteos), los cuales son responsables por más de la mitad de emisiones de GEI en el sector agrícola, causa un daño sustancial a la naturaleza en sitios del mundo muy lejanos de dónde se consumen. Los incendios de la Amazonía importan. Pero un análisis de “causa de raíz” hace evidente que la destrucción allá es una consecuencia de la creciente demanda mundial por carne de res, soya y aceite de palma. El manifiesto llama la atención hacia “el daño causado por las inversiones o incentivos que contribuyen al daño del ambiente”. Vale la pena examinar las maneras en que podemos estar contribuyendo a este daño desde nuestras propias vidas.
Sería demasiado esperar que una Cumbre de las Naciones Unidas pueda cambiar el comportamiento de destrucción a la naturaleza. Pero vale la pena preguntar si el enfoque de “promesas de contribución” por parte de los países, al hacer nuevos compromisos en la Cumbre, refleja una ambición adecuada. Los países están dispuestos a hablar sobre plantar árboles, o control de tala ilegal, pero no hemos visto aún ninguna revisión exhaustiva de las políticas e incentivos económicos que causan la deforestación, los cuales sobrepasan el volumen de rubros para la restauración de bosques.
Los países, compañías y redes civiles estuvieron de acuerdo con la Declaración de los Bosques de Nueva York en la última gran cumbre de acción climática en 2014. La Declaración de Nueva York también usó un enfoque de promesas de contribución y una revisión del progreso del cumplimiento de metas de la Declaración, presentada la última semana, muestra no muy alentadoras noticias: “solo una fracción de las metas de restauración se han cumplido … la evidencia de restauración de bosques suma solo el 18% de la meta de restauración de paisajes forestales para 2020”. Entre tanto el número de compañías con compromisos para reducir la deforestación dentro de su cadena de producción no ha aumentado mucho.
En otras palabras, es “como si no pasara nada”, excepto por los pocos ejemplos positivos liderados por compañías comprometidas. Hemos visto aún menos liderazgo al nivel de naciones. Probablemente esto sea algo que la Cumbre pueda cambiar.
CLARA ha desarrollado una serie de guías para evaluar los nuevos compromisos y su seriedad. Primero, una medición sencilla – ¿Está un país dispuesto a comprometerse con detener la deforestación, ahora? CLARA sostiene que necesitamos una moratoria mundial en la tala de bosques naturales, ahora.
Otros puntos clave que usaremos para evaluar los compromisos son:
- ¿Los derechos indígenas y comunitarios están siendo respetados? Los pueblos indígenas y las comunidades locales se encuentran en primera línea en la pelea contra actores poderosos y necesitan nuestro apoyo. CLARA llama a los estados Latino Americanos a la ratificación del Acuerdo de Escazú – un acuerdo legalmente vinculante que incluye protección a los defensores de derechos humanos y del ambiente.
- ¿La seguridad alimentaria es una prioridad? Hay una inmensa necesidad de apoyo financiero y técnico para los campesinos en su adaptación de un mundo que se está calentando. Esta es una de las áreas más importantes para la asistencia internacional e intercambio que garantice un futuro sostenible. Compromisos financieros son bienvenidos en la Cumbre – y países ricos deberían comprometer ayuda sustancial para el trabajo de adaptación en el sector rural en los países en desarrollo.
- ¿se menciona la agroecología como una solución? Es preocupante notar la fuerte influencia de la agro-industria sobre el grupo de trabajo de SBN, porque ahora es claro: desde aumento en el riesgo de cáncer al “apocalipsis de los insectos” la agricultura dependiente de los químicos nos está matando. La agricultura basada en principio ecológicos de diversidad de cultivos es más sano para el planeta y para los humanos.
- ¿Los compromisos sugieren que las plantaciones son bosques? Las plantaciones no son bosques. Hay una enorme diferencia en la capacidad de resiliencia y productividad de bosques sanos, naturales y diversos comparados a las plantaciones de monocultivos. La métrica adecuada no es “hectáreas de árboles plantados”, debería ser “recuperación de funciones de los ecosistemas forestales, protegiendo al mismo tiempo los medios de subsistencia de los seres humanos”. El cambio más importante debe ir de la economía de extracción de los bosques hacia la economía de la restauración de los bosques. Y hay suficientes trabajos en la segunda.
- ¿Los compromisos hablan de bioenergía como una solución? Reemplazar carbón mineral por la quema de bosques es simplemente una solución falsa y el reconocimiento de esto por parte de los científicos está aumentando. Las llamadas a aumentar el uso de bioenergía son irresponsables y no tienen lugar dentro de la línea de trabajo “Soluciones Basadas en la Naturaleza”.
Y finalmente …
- ¿El compromiso esconde una llamada al uso de compensaciones de mercado? Los miembros de CLARA están convencidos de que la emergencia climática es tanta que la tierra y los bosques no pueden ser usados como compensaciones en modelos de mercado para la continuaciòn del uso de combustibles fósiles. Las empresas de carbón, petróleo y gas, o las aerolíneas, no deberían conseguir un “pase gratis” para continuar contaminando gracias a sus inversiones en los instrumentos de compensaciones de mercado. Cada sector necesita tener sus propios compromisos, y no utilizar la ambición de otro.
El sector de tierras por su cuenta, puede generar soluciones de “largo plazo, costo eficientes y escalables globalmente” como lo describe el Manifiesto. sería el colmo de la locura el negociar las ganancias que se han conseguido con tanto sacrifico en el sector tierras para permitir que continúen el e estilo de vida del consumismo y de las industrias con dependencia en carbón. Es una gran preocupaciòn para los miembros de CLARA que mucho del potencial de los compromisos pueda usarse para cementar la posiciòn de los mercados de transacción que resultan negativos para la ambición y el planeta.
¡Estaremos siguiendo la Cumbre y los compromisos que se hagan en la línea de trabajo de las SBN y esperamos reportar el progreso hecho!