Casi 5 años después del inicio del boom de la deforestación en la Amazonia, el gobierno ha decidido iniciar una estrategia planificada para la lucha contra este grave fenómeno. Crear una ruta de navegación con un instrumento que permita articular acciones institucionales, como lo es el Conpes, era una sentida necesidad que estaba pendiente y que permitirá sumar esfuerzos. Sin embargo, hay varios elementos que quedaron pendientes y que podrían ser el talón de aquiles que podrían convertir este documento en uno más para el archivo.
El CONPES 4021 busca “implementar estrategias transectoriales para el control de la deforestación y la gestión de los bosques para impulsar el uso sostenible del capital natural, la economía forestal y el desarrollo comunitario en los Núcleos de Alta Deforestación (NAD)”. Para ello, establece 4 objetivos específicos:
- Consolidar alternativas sostenibles de producción, conservación y recuperación de los bienes y servicios ecosistémicos de los bosques para el desarrollo rural y la estabilización de la frontera agrícola.
- Mejorar la articulación transectorial y la armonización de los instrumentos de planificación sectorial, territorial y ambiental para el control de la deforestación y la gestión de los bosques.
- Fortalecer las capacidades institucionales en materia de prevención, investigación y judicialización para mejorar el control de las economías ilegales que promueven la deforestación.
- Mejorar la gestión de la información sobre el estado y presiones del recurso forestal, como soporte para el desarrollo de acciones orientadas a la administración y la gestión sostenible de los bosques del país.
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