Por Juan Carlos Lasso Fuentes (@juanlass)
- Cambio climático es un asunto político, económico y de poder
- Voces de líderes globales evidencian preocupación frente al planeta
- El 2015 es un año clave en materia de decisiones respecto a crisis ambiental
- Calentamiento es un tema global que debe enfrentarse desde los territorios
- Algunos aprovechan tendencia verde para hacer negocio
El modelo político y económico implantado en el mundo desde hace varias décadas ha llevado a que se establezcan unas dinámicas de producción que generan costos ambientales muy fuertes para el planeta. Los hechos son claros y evidencian que el Cambio Climático es un asunto político, económico y de poder.
Científicos han advertido que si la concentración atmosférica de CO2 continúa por encima de 350 partes por millón (ppm) se intensificarán las lluvias torrenciales, las inundaciones, las olas de calor, las tormentas más densas de lo usual y las sequías.
Estas últimas son manifestaciones que tiene el cambio climático y que ya se sienten en mayor o menor medida en distintos puntos del planeta.
La complejidad y variedad de su impacto constituye, según la ONU, en uno de los mayores desafíos que la humanidad deberá afrontar en el presente siglo.
El Cambio Climático es irreversible. Por esto, la adaptación integral de las sociedades, es el único camino posible. Es un asunto de racionalidad, de pobres y ricos de países desarrollados y no, pues la naturaleza no distingue entre unos u otros.
“El desafío urgente de proteger nuestra casa común incluye la preocupación de unir a toda la familia humana en la búsqueda de un desarrollo sostenible e integral, pues sabemos que las cosas pueden cambiar”, exhortó recientemente el Papa Francisco a la humanidad en su encíclica ‘Laudato si’.
La cultura del descarte, la contaminación por residuos, por el transporte, el humo de la industria, los depósitos de sustancias que contribuyen a la acidificación del suelo y del agua, los fertilizantes, insecticidas, fungicidas, controladores de malezas, los agrotóxicos y los contaminantes atmosféricos amenazan “la casa común”, La Tierra y al hombre mismo, dice la encíclica.
Pero no sólo el papa Francisco se ha referido a la crítica situación que atraviesa el planeta.
“Los gobiernos aún no perciben la gravedad del calentamiento global como una amenaza a la existencia misma de la humanidad”[i].
Aunque en 1997 EEUU firmó el principal instrumento internacional para hacer frente al cambio climático, esto es, el Acuerdo de Kioto[ii], no lo ratificó posteriormente.
El Acuerdo que entró en vigor el 16 de febrero de 2005 con el compromiso de más de 160 países que producen el 61% de las emisiones de gases de efecto invernadero en el mundo (dióxido de carbono (CO2), metano (CH4), óxido nitroso (N2O), hidrofluorcarbonos (HFC), perfluorcarbonos (PFC) y hexafluoruro de azufre (SF6)), en reducirlas, no se ha tenido el impacto y los resultados esperados.
Sin embargo, recientemente, el presidente norteamericano Barack Obama, presentó un Plan que busca reducir las emisiones de carbono de las centrales eléctricas de su país en un 32% al año 2030[iii].
“Solamente tenemos un hogar, un planeta. No hay un plan B”, dijo Obama en un discurso en la Casa Blanca, en el que se insistió en que el cambio climático no es un problema de las generaciones venideras sino que llama ya está aquí”.
Colombia no es ajena a este fenómeno. En el mapa de riesgos y oportunidades asociados al cambio climático aparece como un país especialmente vulnerable.
“Por la ubicación de su población en zonas inundables de las costas y en suelos inestables delas partes altas de las cordilleras, y por presentar una alta recurrencia y magnitud de desastres asociados al clima[iv]”.
Una adaptación que involucra a todos y cada uno de los individuos y ciudadanos del mundo, pero también a todos los sectores: el productivo, el empresarial, los Estados, “los gobiernos locales las universidades, los medios de comunicación”[v].
Por este motivo y porque los impactos del cambio climático son diversos y complejos, éstos deben tomarse en cuenta a conciencia dentro delos procesos de planificación del desarrollo.
Aunque Colombia no es uno de los países que más impacto genera en el cambio climático sino que claramente son las superpotencias, el país también se han planteado iniciativas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
“Hoy me complace anunciar al mundo entero, como lo están esperando, que el objetivo de Colombia –el compromiso de los colombianos frente a la supervivencia del planeta– será disminuir nuestras emisiones de carbono en un 20 por ciento – ¡una quinta parte!– de aquí al año 2030”, anunció el presidente Juan Manuel Santos el 20 de julio pasado[vi].
La meta del país es reducir los GEI en un 20% al año 2030. Esta propuesta será la que Colombia llevará a la COP 21, en la que se espera que todas las naciones, desarrolladas o no, presenten sus compromisos[vii] .
Asimismo, llama la atención el activo papel que ha tenido la administración de Bogotá en los asuntos relacionados con el fenómeno del Cambio Climático y su preocupación por la sostenibilidad medio ambiental[viii].
Sobre ese interés de que Bogotá esté presente con su delegación propia en París y el reconocimiento que se ha venido dando a la ciudad por trabajar políticas en torno a estos asuntos, el alcalde Petro ha asegurado:
“Bogotá ha venido ganando reconocimiento en la región por su liderazgo en temas de adaptación al cambio climático, lo que la ha llevado a ser el epicentro de este encuentro. Queremos tener una voz en París, que las ciudades se reúnan en Bogotá a manifestar su posición. El diálogo por el cambio climático no puede ser solo entre Estados y Naciones, sino entre ciudades, que son las que enfrentan sus consecuencias”.
Cambio de modelo
Y es que aunque son populares las campañas que se hacen para que las personas del común apaguen las luces o los aparatos electrónicos que no estén usando; se invita a reciclar y se propone un uso racional del agua, este problema del Cambio Climático es un asunto que va mucho más allá y que plantea un cambio del modelo económico y político que tiene el planeta.
En esa línea, el experto en temas ambientales y consultor internacional Gustavo Wilches Chaux afirma:
“Se oyen con frecuencia dos planteamientos: en primer lugar, que hay que salvar el planeta y en segundo lugar que hay que combatir el cambio climático. Yo creo que, en primer lugar, que el planeta se está salvando solo y el problema es que ha activado precisamente todo su sistema inmunológico para salvarse y es lo que llamamos el cambio climático”.
Además, Wilches Chaux asegura que lo que está haciendo el planeta con el cambio climático es buscar salir de una plaga que lo está afectando y esa plaga son los seres humanos con su actual modelo de desarrollo. En ese sentido, sostiene que más que combatir el cambio climático lo que se debe hacer es revisar el modelo y la manera como nos relacionamos con el planeta para ponernos del lado de su sistema inmunológico.
A su vez, Manuel Guzmán Hennessey, director de la Red Latinoamericana sobre Cambio Climático, plantea que el cambio climático no tiene solución y las toneladas de dióxido de carbono que esta civilización ha lanzado a la atmósfera están ahí y se seguirán manteniendo, por lo menos, por otros 100 años .
“Nosotros no podemos evitar nuestra dependencia de los combustibles fósiles, por lo menos, en esos mismos 100 años. Podemos hacer gradualmente una transición energética y podemos acelerar los procesos de no dependencia de los combustibles fósiles, pero esto en el esquema económico actual es muy difícil”, asegura Guzmán Hennessy.
La amenaza más grande del planeta
La realidad es que los hechos han cambiado la percepción y necesidad de conocimiento e información de la humanidad en poco tiempo frente a una situación inocultable y universal.
No se exagera cuando se dice que el cambio climático es la amenaza más grande que hoy enfrenta la humanidad, señala el abogado Alejandro Mantilla, miembro del Congreso de los Pueblos.
“Realmente estamos ante un desafío tan grande que puede casi que modificar los patrones de consumo, de producción y las dinámicas, económicas, sociales, políticas e incluso los conflictos militares a nivel global”, explica Mantilla.
Hay señales de que el cambio climático es una realidad, advierte, y recuerda una información reciente de la NASAsegún la cual junio de 2015 fue el mes más caluroso en la historia de la humanidad[ix].
No obstante, Mantilla reconoce que ante esta realidad hay dos líneas para enfrentarla.
Una línea denominada ‘Capitalismo Verde’, que según él no busca nada más que hacer negocio con la naturaleza y los ecosistemas, así como otra línea que sería reinventar la sociedad y desde la ecología política plantea cambiar radicalmente los patrones de consumo en aras de cuidar los ecosistemas, señala.
Para la abogada Milena Bernal, investigadora de la ONG Ambiente y Sociedad, es evidente que el cambio climático es una realidad y eso se ve todos los días con los fenómenos que se presentan en cada uno de los países del planeta[x].
Otro tanto considera el exdirector de Economía Rural de la Alcaldía Mayor de Bogotá, Andrés Charry.
Algunos indicadores que dejan ver que el cambio climático es la mayor amenaza para el planeta son los precios de los alimentos, las necesidades básicas insatisfechas y los planteamientos hechos por líderes locales, como el alcaldeGustavo Petro, quien fue al Vaticano a exponer ante el papa Francisco los problemas que la ciudad vive por este tema[xi].
Charry advierte, que pese a esto, también hay grupos y organizaciones que se enriquecen a partir del fenómeno del cambio climático y con el ofrecimiento de paquetes para la prevención de desastres o políticas con supuestas medidas para enfrentar la situación.
¿Cómo enfrentarlo?
Las preocupaciones que plantea el Cambio Climático no son menores, pero no son individuales y están ligadas a sectores como el económico y el político[xii].
Por ejemplo, el Estudio Nacional del Agua presentado recientemente por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales IDEAM señala que 17.5 millones de personas tienen acceso al agua en condiciones críticas y mientras tanto el recurso hídrico en el país se va a fines diferentes.
“Hay que mirar hacia dónde se está yendo el agua porque apenas el 8% es para uso doméstico y muy poca del agua que se usa en Colombia se va a cubrir necesidades de la gente”, advierte.
La agricultura, explica Mantilla, se lleva el 46% del agua pero no propiamente el preciado líquido se va a cubrir las tareas de los pequeños agricultores, sino a los cultivos industrializados de palma de cera y caña de azúcar.
Asimismo, el sector energético gasta el 20% del total del agua del país y lo que se encuentra, según Mantilla, es que son los grandes negociantes son los que están usando la mayor parte de agua, explica Alejandro Mantilla[xiii].
Para Mantilla lo que anunció el presidente Santos encierra una evidente contradicción.
“Decir que va a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 20%[xiv] es una meta contraria a lo que plantea el Plan de Desarrollo 2014 – 2018 ‘Todos por un nuevo país’ [xv].
Señala Mantilla que el Plan de Desarrollo “continúa con una política extractivista que fortalece la gran minería, debilita la agricultura tradicional y debilita los bosques”.
También llama la atención planteamientos como el hecho recientemente por Juan Carlos Echeverry, presidente deEcopetrol, quien aseguró que el país no se puede dar el lujo de eliminar técnicas como la del Fracking [xvi].
“Son planteamientos completamente apresurados. En el ámbito internacional Francia y otros países han declarado abiertamente la prohibición del Fracking. Entonces no entiendo por qué nosotros no adoptamos principios de precaución y decimos: aquí si se va a hacer Fracking”, expresa Milena Bernal[xvii].
Hay que revisar con detenimiento estos discursos de quienes dicen que no se le puede negar a Colombia la oportunidad de desarrollarse a partir de la explotación de recursos como el petróleo y el carbón, precisa Andrés Charry.
“En la época del señor Uribe se dio un crecimiento de la economía, pero un país que estaba sumido en el subdesarrollo. También la otra cara de un país que se desarrolla en términos sociales, en términos de integración, de políticas para los más favorecidos, pues tampoco se puede quedar sin crecimiento de capital”, asegura Charry.
Para Alejandro Mantilla el problema del cambio climático es político y requiere de medidas de política pública, pero también decisiones globales.
“Hay que pensar una propuesta global de reducción de emisiones, hay que defender las luchas por el territorio, por la defensa de los bosques y la defensa del agua, pero también soluciones personales”, puntualiza Mantilla.
Una manifestación del crecimiento de esa conciencia ambiental es la Cumbre del Clima que se desarrollará en Bogotá del 20 al 23 de septiembre, como antesala de lo que será la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP 21), que se adelantará en París, entre el 30 de noviembre y el 11 de diciembre de este 2015.
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[i] Protocolo de Kyoto: paradojas, derrotas y victorias. RazonPublica.com
[ii] El protocolo de Kioto. Foro Nuclear.
[iii] Cambio Climático: Obama y su “ambicioso” plan de reducción de emisiones de CO2 BBC
[iv] El Cambio Climático en Colombia Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)
[v] Algo ha cambiado. Manuel Guzmán Hennessey. ElTiempo.com
[vi] Palabras del Presidente Juan Manuel Santos en la instalación de la legislatura del Congreso de la República 2015-2016. Presidencia.gov.co
[vii] Colombia se compromete a reducir el 20% de sus emisiones de gases de efecto invernadero para el año 2030.Minambiente.gov.co
[viii] Alcalde Petro asiste a Cumbre Mundial sobre el clima y los territorios en Lyon, Francia Bogotá Humana
[ix] Junio de 2015 fue el más caluroso jamás registrado La Vanguardia
[x] Cambio climático: el mundo al revés National Geographic
[xi] ¿Qué dijo el alcalde Gustavo Petro en el Vaticano? El Tiempo
[xii] Inversión china en Latinoamérica: ¿Crisis financiera o cambio climático? www.estrategiaynegocios.net
[xiii] Estas son las cifras del Estudio del Agua El Colombiano
[xiv] Colombia apuesta a un modelo de desarrollo bajo en Carbono. DiarioPortafolio.co
[xv] El Plan de Desarrollo potreriza la selva y seca las fuentes hídricas Blogs Capital
[xvi] Echeverry y el fracking Diario Vanguardia
[xvii] 7 temores sobre el fracking ¿Ciencia o ficción? BBC
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Los análisis y opiniones de este artículo fueron recogidos de los planteamientos expuestos por Milena Bernal, investigadora de la ONG Ambiente y Sociedad; Alejandro Mantilla, miembro del Congreso de los Pueblos, y el exdirector de Economía Rural de la Alcaldía Mayor de Bogotá, Andrés Charry, en el programa “Cambio Climático, ¿problema social, político y económico?” de La Otra Vuelta (@LaOtraVueltaTV) Franja de Análisis de Canal Capital, conducido por José Antequera Guzmán (@Antequerajose) y Javier Cuadros Castillo (@fjaviercuadros), y emitido el 12 de agosto de 2015. Curaduría de Contenidos Gloria Ortega Pérez.